lunes, 10 de diciembre de 2012

Trenes, nacionales y cintas de caspa




Viene variado el tema.

El Premio Nacional de Poesía se lo llevó nada más y nada menos que Antonio Carvajal, uno de los mejores representantes de la poesía más conservadora que existe en la actualidad. Cuando un señor ha pasado su vida contando sílabas y diciendo como deben ser contadas sin aportar ninguna evolución digna de mención a la prosodia, y cuando su poesía es un vergel (¿?) de lugares comunes, no podemos dejar de preguntarnos qué ha llevado al jurado, lleno de desconocidos pero con la presencia del compañero y antiguo Secretario de Estado de Cultura de Aznar, a otorgar el premio a Carvajal. Si los gobiernos del PSOE premian a poetas cercanos a su partido pero, en general, poetas de calidad, los gobiernos del PP premian en ocasiones a poetas cuya calidad literaria, y capacidad para soportar el paso de los años, es muy discutible (también con alguna excepción). De cualquier manera, darle el premio a Carvajal, un premio que parece a toda una carrera más que a un libro, parece una broma. La selección del festival Cosmopoética de este año, en la que la sección Loewe realizó un casposo homenaje a la poesía de los novísimos, ya anticipaba por donde vendría el premio este año. No sabemos si caeremos más bajo en este premio pero el listón ha quedado por los suelos. Enhorabuena.

Lo que nos lleva directamente al caso Javier Marías, al que algunos han criticado porque, en su opinión, dejaba en mal lugar a todos aquellos escritores que sí habían aceptado el premio. Hace bien Marías en no aceptar el Nacional. Resulta anacrónico que papá Estado, además de usar nuestros impuestos para reflotar las cajas de ahorro que nuestros políticos han quebrado, nos diga y señale cuál es el mejor libro del año (o el mejor cómic, o lo que sea). Dado que el número de categorías aumenta cada año acabaremos con el Premio Nacional al Mejor Polvo o al Mejor Robo de Guante Blanco. Aunque los premios no los inventara Franco, todo tiene un poso tan antiguo que lo extraño es que no haya muchos más autores que rechacen participar en una pantomima que van tan en contra de la independencia del artista. Quizá si el premio no conllevara unos miles de euros, todo sería más fácil. Pero si en ese caso habría más premiados que rechazaran el galardón, ¿no está comprando el premio, en cierta forma, a los autores? Que cada cual saque sus propias conclusiones. Eso sí, resulta asfixiante el uso comercial que algunos premiados hacen del premio, como si fuera una especie de nuevo título nobiliario que figura en todas sus actuaciones y bolos.

En donde no nos parece coherente Marías es en la aceptación de premios privados. Aunque las razones sean distintas, ¿qué le lleva a pensar que un premio privado español es más limpio que un premio público? Pongamos un ejemplo que nos ha llegado gracias a una amable lectora.
Los Premios de la Crítica, hoy va de mayúsculas, son unos premios que la Asociación Española de Críticos Literarios creó en 1956 (no hace falta recordar quién gobernaba España en esa época). Nuestra única pega con respecto a esos premios es que se autodenominen “Premios de la Crítica”, cuando en realidad son unos premios que otorga una asociación determinada de críticos literarios. Llamarlos “de la crítica” resulta algo ambicioso y pontificio por ese carácter universalizador que da el artículo. 

Con los años han ido surgiendo reinos de taifas en las Comunidades  Autónomas, que han creado sus propios premios, siendo normal que el premiado otorgue prestigio al premio y no al revés. De las últimas CC.AA en incorporarse fue Madrid, a través de una desconocida AMECL (Asociación Madrileña de Escritores y Críticos Literarios). Y atención porque la información no tiene desperdicio. Esta asociación se crea por la voluntad e iniciativa de dos compañeros de colegio de pago (cosa muy libre de hacer como recalcan los responsables de educación peperos). Ambos señores tienen, a su vez, dos editoriales en las que los autores deben pagar por publicar sus libros: una es el Grupo Editorial Pérez-Ayala (Poesía eres tú, Ediciones Rilke) y la otra Ediciones Vitruvio. La página web de la AMECL conecta desde hace años con la del Grupo Editorial mencionado (o más bien a la inversa). La Asociación tiene como domicilio social una amplia vivienda en Doctor Fleming, Madrid, que a su vez es el domicilio del dueño del Grupo Editorial Pérez-Ayala. En 2008, el primer año de actividad, los premios se dieron a través de otra asociación que inauguraron estos señores junto con algún otro editor que pasaba por allí, Asociación de Editores de Poesía, y concedió el premio a un libro de la editorial Vitruvio. En el año 2009, con la entrada de Chus Visor en la Asociación de Editores, el premio fue para un libro de Visor, claro. En el año 2010, atención, el premio fue para el dueño de Ediciones Vitruvio, Pablo Méndez, por un libro publicado, atención de nuevo, por el Grupo Editorial Pérez Ayala. Muy bien. Y en el año 2011 el premio ha recaído de nuevo en un libro de ediciones Vitruvio. Es decir, que de cuatro premios, tres van a la casa de uno de los fundadores, que imaginamos utilizará esos premios para la legítima promoción de su negocio. No hay nada ilegal en esto, dado que es una asociación privada, pero sí que resulta un esperpento, especialmente cuando se lee la biografía o la página wiki de alguno de estos autores, y se lee: Premio de la Crítica Madrileña. Guauu. ¿Qué crítica? ¿Qué críticos? 

Cada año, además del “Premio de la Crítica Madrileña”, esta nueva asociación concede un premio de narrativa. Pues bien, este año el premio ha ido a parar, cosas del destino, a Javier Marías (Almudena Grandes, la mujercísima, lo ganó el pasado año). Javier, si está usted leyendo esto o alguien se lo manda, ¿nos puede explicar qué sentido tiene aceptar este premio de una asociación de críticos que no tiene críticos reconocidos, y cuyos jurados deben ser muy secretos porque nunca aparecen, y no aceptar el Premio Nacional? ¿No le saldría más rentable rechazar directamente cualquier premio que le den en nuestro querido país? Y puestos a preguntar, ¿qué hace la Asociación de Críticos Literarios para evitar hechos de este tipo, si es que puede hacer algo? ¿Por qué no crear el Premio de la Crítica de la Crítica?

También fue previsible el premio Cervantes para Caballero Bonald. A este colectivo Bonald le gusta bastante más en otras facetas de la literatura que en poesía, en donde se ahoga en su propio barroquismo, incapaz de evolucionar. El carácter en parte provinciano del premio se realza cuando miramos a la otra orilla del Atlántico y vemos quiénes podrían haberlo obtenido. Resulta estúpido que año sí año no, en el mejor de los casos, el premio lo tenga que ganar un español, cuando la lista de escritores latinoamericanos quintuplica el número de escritores españoles. Es como si el que paga una cena se escoge la mitad de la cena y reparte el resto entre seis comensales. De los 38 premios concedidos, 20 han ido a parar a España. Dejemos ya la colonización y si queremos que España tenga un premio literario de prestigio, cosa que hasta ahora no hemos logrado ni con el Cervantes ni con el Príncipe de Asturias, mejoremos la calidad del jurado, convirtámoslo en un jurado realmente internacional, despolitizado, y dejemos los amiguismos para otros menesteres.

Y para terminar, unas breves palabras para los Premios de Tren. Efectivamente, el famoso trenecito es lo que parecen hacer los discípulos y cachorros de Chus Visor. Observen la lista de ganadores del premio:

Fernando Valverde Rodríguez, El viaje del mundo (2012)
Raquel Lanseros, Cayo Hueso - Dublín (2011)
Felipe Benítez Reyes, Ciudades del sueño (2010)
Jorge Galán, Los trenes en la niebla (2009)
Marco Antonio Campos, Aquellas cartas (2008)
Alvaro Salvador, Estación de Servicio III (2007)
Antonio Lucas, En andenes que no existen (2006)
Javier Lorenzo Candel, La tierra que persigue (2005)
Benjamín Prado Rodríguez, Ecosistema (2004)
Carlos Marzal, Catedral de inquietud (2003)
Vicente Gallego, Estación de paso (2002)

Y ojo que los premios no sólo se otorgan en poesía. Mirando la lista de cuentos, vaya si son cuentos, también hay sorpresas. Y por último, la lista de nuevos cachorros puede verse en los accésit. Si los señores con accésit se agachan lo suficiente podrán contar con el dinero contante y sonante del erario público en nuevos eventos. La lista completa de vagones en esta dirección:


Felices vacaciones, Navidad o lo que ustedes celebren.

sábado, 27 de octubre de 2012

Premio Ciudad de Burgos: por fin alguien se mueve


Tenía que llegar el día. La impunidad, la hipocresía, el juego con el dinero público de la pandilla de visores, su reparto del botín, terminará saltando por los aires. La noticia que ha aparecido hoy destapa lo que es una práctica habitual en los premios de esta editorial. Afortunadamente, por primera vez en la historia, las personas encargadas de hacer la preselección de los poemarios han denunciado la mierda que se estaba ocultando. Bravo por su valentía. El beneficiado no es otro que Daniel Rodríguez Moya, discípulo fiel de Montero en Granada, otro miembro de la antología contra la incertidumbre (porque ellos tienen la certidumbre de ganar premios) y organizador de esa reunión de amiguetes llamada festival de poesía de Granada. Leed la noticia y juzgad por vosotros mismos. Eso sí, cuando oigáis a Montero en un lugar público haciendo apologia de la ética, por favor levantad el dedo corazón hacia su persona. O dadle simplemente la espalda. Hay muchos banqueros con un sentido de la ética más elevado que el de este individuo. Respecto a la presencia de Jesús Jiménez Domínguez, quién te ha visto y quién te ve, chaval. Por las compañías y por la bajada notabilísima en la calidad de tu poesía respecto a tu anterior libro. La codicia nubla los sentidos.

http://www.diariodeburgos.es/noticia/Z3D60CD2D-DDBE-1B23-E3F1629188182037/20121027/polemica/decision/jurado/cuestiona/limpieza/premio/ciudad/burgos

Y ahora sería el momento adecuado para que los once finalistas se juntaran y presentaran un querella. Ánimo.

martes, 10 de julio de 2012

Nos vamos desalojando



Amigos lectoras y lectores:

Han sido unos cuantos años de lucha desigual y con inciertos resultados. El objetivo inicial del blog fue denunciar tanto la corrupción existente en los premios de poesía como la forma en la que el amiguismo se ha apoderado de toda la crítica hasta el punto que ya no se lee una sola reseña negativa de un libro (con alguna honrosa excepción).

La poesía es un microcosmos que refleja perfectamente la situación económica y ética de nuestro país. A nivel de premios los casos de corrupción, de amiguismos y endogamias no se han reducido ni un ápice desde que comenzamos este blog. Es más, algunos de los sujetos que hemos criticado han seguido mamando del dinero público en premios amañados que apestan desde la presentación de las bases hasta el resultado de un jurado en el que o bien no se sabe quién lo compone o bien es una especie de trenecito sexual en el que todos se han chupado la polla en algún momento (y decimos la polla porque suelen ser hombres). Es curioso que estos mismos personajes luego se escandalicen de actitudes similares en banqueros, políticos de derechas y otro tipo de fauna. Parece que la única mierda que huelen es la de los demás. Pues no, jurados y premiados, también huele y muy mal la vuestra.

En estas condiciones seguir valorando premios es una forma absurda de predicar en el desierto. Por mucho que nos digan que hay gente que se han moderado "por lo que puedan decir los addison", lo único que puede ayudar a los premios de poesía es la crisis. Ayudar a su desaparición, nos referimos.

En lo poético, y de nuevo salvo algunas excepciones, vivimos en un panorama en el que se están publicando libros extraordinarios que apenas tienen acogida en la prensa oficial mientras que auténticos bodrios ocupan espacios inauditos (de nuevo con alguna pequeña excepción).

Al problema ético y al problema de una crítica muerta se añade la inexistencia de un público lector. El obstáculo no estaba, como señalaba aquel manifiesto para idiotas, en la mayor o menor dificultad de la poesía. El problema, como tantos otros relacionados con España, es más profundo y se llama educación. La forma en la que se enseña poesía en España es una garantía para espantar al 99,99% de la población.

¿Es esta una despedida definitiva? Nunca se sabe. De momento, este año, mejor dicho el que viene, publicaremos la lista de mejores libros del año 2012 como ejercicio de despedida oficial. Hasta ese momento, salvo que veamos algo que nos produzca una rabia muy pronunciada, nos dedicaremos a nuestros libros, a nuestros trabajos y a nuestras vidas, además de a leer poesía, algo que nos sigue apasionando.

Vivimos en un país en el que las personas aguantan todo y la poesía es un terreno más. No somos especiales. No somos divinos. Somos parte de una cultura que en su mansedumbre y en su aceptación de la corrupción a todos los niveles merece todo lo que le está pasando.

Hasta pronto y gracias a todos por vuestro apoyo durante estos años. Hace meses llegamos al millón de visitas, que son, quizá, demasiadas para estas gargantas ya roncas.

Colectivo Addison de Witt

miércoles, 9 de mayo de 2012

Análisis de premios del último trimestre 2011/2012

El poeta nicaragüense, Ernesto Cardenal, ha sido el ganador de la XXI Edición del Premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana convocado conjuntamente por Patrimonio Nacional y la Universidad de Salamanca. El Jurado estuvo formado por José Rodríguez-Spiteri Palazuelo, Daniel Hernández Ruipérez, José Manuel Blecua, Adrián Vitier Rodríguez, Víctor García de la Concha, Gloria Pérez Salmerón, Antonio Lobo Antunes, Pilar Martín-Laborda y Bergasa, José Manuel Mendes, Genoveva Iriarte Esguerra, Soledad Puértolas, Luis Antonio de Villena, Jaime Siles, José Miguel Santiago Castelo, Luis Alberto de Cuenca y Prado, José Manuel Caballero Bonald, Javier Sanjosé Lera, Emilio de Miguel Martínez. Actuó como Secretaria del Premio Esther Martínez Quinteiro.

La ventaja de contar un jurado tan amplio es que el margen para componendas se reduce considerablemente. Aunque el Ernesto Cardenal de ahora es una versión domesticada del Ernesto de hace 30 años, resulta curioso que un gobierno del PP haya dado el premio al antiguo revolucionario. La reina Sofía debe estar realmente enfadada con su marido. Hay muchísimos poetas mejores que Ernesto Cardenal pero no vemos problemas respecto a la ecuanimidad del premio:

Valoración subjetiva de la ecuanimidad del premio: 70/100

El escritor cordobés Fernando Serrano se embolsó los 6.000 euros que lo acreditan como el ganador de la XXXII edición del Premio Internacional de Poesía Odón Betanzos, por su obra "He soñado un poema". El jurado de esta edición estuvo compuesto por Juan Antonio Guzmán, como presidente, y por Dolores Izquierdo Labrado y Domingo Prieto.

No tenemos demasiados elementos para valorar correctamente este premio. El jurado es muy pequeño y Andalucía más pequeña de lo que parece en el mapa. Salvo que alguien tenga más información al respecto, nuestra nota es positiva:

Valoración subjetiva de la ecuanimidad del premio entendida como la posibilidad de que gane un desconocido: 70/100

El mal llamado Premio de la Crítica 2012, fallado ayer en Soria, fue ganado a título póstumo por Tomás Segovia por su poemario "Estuario", dentro de la modalidad de poesía. El presidente de la Asociación Española de Críticos Literarios (AECL), ese es el nombre que deberían llevar, Ángel Basanta, informó del resultado de los premios, instituidos en 1956, de convocatoria anual y que han sido fallados en Soria con motivo de la conmemoración en 2012 del centenario del poemario "Campos de Castilla".

No hemos encontrado en ningún comunicado de prensa la composición del jurado salvo en lo que a su portavoz se refiere. La AECL vuelve un año más a mostrar su torpeza y mal hacer respecto a la crítica de poesía. Tomás Segovia ha escrito al menos cinco libros de poesía significativamente mejores que "Estuario" y que podrían haber sido perfectamente premios de la AECL en años anteriores. Eso habría servido primero para demostrar que los críticos de la AECL tienen un mínimo de criterio académico y segundo para que Tomás Segovia recibiera el premio cuando realmente lo merecería y podría haberlo disfrutado. De nuevo, tarde y mal. Ojalá algún día salga una nueva asociación de críticos que sitúe la crítica de poesía al nivel que merece. En manos de esta gente no va a ningún lado.

Valoración subjetiva de la ecuanimidad del premio entendida como la posibilidad de que gane un desconocido: 0/100

Inmaculada Pelegrín se adjudicó el XXXII Premio Hispanoamericano de Poesía Juan Ramón Jiménez 2011, dotado con 12.000 euros, por la obra «Cuestión de horas, Dies fugit».el fallo del jurado, presidido por Luis Alberto de Cuenca. Ha sido imposible encontrar la composición del resto del jurado por lo que vemos imposible emitir una opinión sobre la ecuanimidad de este premio.


El jurado del premio Miguel Hernández en la edición de este año ha estado presidido por el director del Instituto Alicantino de Cultura Juan Gil-Albert y profesor de la Universidad Miguel Hernández de Elche, José Luis Ferri, por su condición de patrono de la entidad convocante del galardón literario. Junto a Ferri, han formado parte del jurado el director de la Fundación Cultural Miguel Hernández, Juan José Sánchez Balaguer; el editor Jesús Munárriz; el director de la Institución Alfons el Magnànim, Ricardo Bellveser; el profesor y poeta Joaquín Juan Penalva, y el rector de la Universidad de Granada, Luis García Montero.

Premio difícil de valorar. Es evidente la relación de amistad de muchos años entre Jesús Munárriz y Manuel Rico. La presencia de Luis García Montero, sin embargo, desconcierta. Ambos no han sido amigos, precisamente, en los últimos tiempos. ¿Habrá habido una reconciliación? Difícil de saber. En cualquier caso, un nuevo año este premio va a casa de una persona muy cercana a Hiperión. Continúa siendo un premio que no nos gusta nada.

Valoración subjetiva de la ecuanimidad del premio entendida como la posibilidad de que gane un desconocido: 0/100

La poeta sevillana María Sanz, con el libro "Danaide", ha resultado ganadora de la segunda edición del Premio Iberoamericano de Poesía "Hermanos Machado", dotado con 8.000 euros. María Sanz (Sevilla, 1956) cuenta con los premios "Leonor", "Tiflos" y "Ricardo Molina", y entre sus últimos títulos publicados figuran "Hypnos en la ventana" (2009) y "Retablos de cenizas" (2011). El jurado estuvo compuesto por la delegada de Cultura del Ayuntamiento María del Mar Sánchez Estrella, los escritores Jacobo Cortines, Ignacio F. Garmendia, Uberto Stabile, Manuel José de Lara, Abelardo Linares y Antonio Rivero Taravillo. Exceso de sevillanismo en este premio, en el que es difícil saber dónde acaba la premiada y donde comienza el jurado.

Valoración subjetiva de la ecuanimidad del premio entendida como la posibilidad de que gane un desconocido: 20/100

El poemario 'La flauta de los bárbaros', del periodista y director de El Norte de Castilla, Carlos Aganzo, ha sido galardonado con el II Premio de Poesía Universidad de León. Según han informado fuentes de la Institución académica en un comunicado recogido por Europa Press, el jurado se reunió en la tarde de ayer y otorgó el premio a Aganzo tras deliberar entre las 196 obras presentadas, una veintena de ellas procedentes de América y Europa. Carlos Aganzo es director de El Norte de Castilla y entre sus premios de poesía destacan el 'Murallas de Ávila' (1997), el 'Jorge Guillén' de Valladolid (2003) y el 'Gil de Biedma' (2010). El jurado, presidido por la vicerrectora de Campus de la ULE, Victoria Seco; estuvo integrado por los poetas Antonio Colinas y Adolfo Alonso Ares, los catedráticos José Enrique Martínez y José María Balcells; el director del Instituto Leonés de Cultura, Jesús Celis Sánchez; y el ganador de la pasada edición con el poemario 'Horas extra', Jaime Siles Ruiz.

No es la primera vez que Aganzo gana un premio en su zona de influencia periodística. Si nos atenemos a lo visto hasta ahora en este análisis de premios, la cercanía geográfica, en varios casos, juega un papel crucial en la obtención del premio. Una vez más, no nos lo creemos.

Valoración subjetiva de la ecuanimidad del premio entendida como la posibilidad de que gane un desconocido: 10/100

José Luis Rey sumó ayer un nuevo galardón a su trayectoria literaria. El poeta de Puente Genil ganó el premio Tiflos, convocado por la ONCE, en la modalidad poética por su obra "Las visiones". El jurado estuvo integrado, junto a Luis Alberto de Cuenca, por Ángel García López, Fanny Rubio y el editor Jesús García Sánchez, "Chus Visor", de la editorial Visor.

Chus siempre mima a sus chicos, especialmente a quienes ya les quedan pocos premios de Visor que ganar. Nos preguntamos de qué vivirá esta gente una vez que terminen ganando todos los premios de su editorial (imaginamos que es una pregunta que algunos también se hacen).

Valoración subjetiva de la ecuanimidad del premio entendida como la posibilidad de que gane un desconocido: 0/100

La editorial Visor se hará a cargo a partir de ahora de la edición del premio de Poesía Ciudad de Burgos, lo que viene a confirmar que todas nuestras sospechas de que se amaban eran ciertas. Visor sustituye a partir de este momento a la editorial DVD que ha publicado en los últimos diez años los premios ganadores de este certamen convocado por el Instituto Municipal de Cultura y Turismo del Ayuntamiento de Burgos. El IMC ha realizado las gestiones para que Visor se haga cargo de la edición del premio, después de que Sergio Gaspar, responsable de DVD, "comunicara la difícil situación por la que está atravesando esta editorial en los últimos meses, que podían impedir la edición del premio como se ha realizado en la última década. Para la consecución de este objetivo ha sido fundamental la intermediación del presidente del jurado de la última edición, el poeta y escritor, Luis García Montero". El premio de Poesía Ciudad de Burgos celebró el pasado año su 38 edición entre los cuales resultó ganadora la obra ‘Frecuencias’, de Jesús Jiménez Domínguez, poeta de la ciudad de Zaragoza. El jurado estuvo compuesto por Luis García Montero, Carlos Aganzo (Premio Jaime Gil de Biedma 2010 y director de El Norte de Castilla), Diego Doncel (premiado en la anterior edición), y los poetas Juan Manuel Macías y Ricardo Ruiz Nebreda, éste último encargado también junto a José Luis Morante de la preselección de los trabajos. Como secretario actuó Juan Carlos Pérez Manrique, director de las bibliotecas municipales de Burgos.

Jesús Jiménez Domínguez ya ganó un premio de DVD, recordamos que este premio ha sido DVD hasta la hora de publicarlo, y es una persona especialmente querida por la editorial. Entra dentro de lo normal que Jesús lo haya ganado y va dentro de la filosofía de la editorial, que parece no está pasando por su mejor momento. Una pena por la editorial y otro premio que nos desagrada tras el giro que parecía haber dado el pasado año. En sus nuevas manos, sólo podrá empeorar.

Valoración subjetiva de la ecuanimidad del premio entendida como la posibilidad de que gane un desconocido: 2 / 100

El poeta extremeño Juan María Calles (Cáceres, 1963), con el poemario "La música del aire", ha obtenido el IV Premio de Poesía de la Fundación Ecoem, que dotado con 6.000 euros, se ha fallado en Sevilla. Juan María Calles, nacido en Cáceres en 1963, y residente en la actualidad en Valencia, ha publicado varios libros de poesía, entre los que destaca "Silencio celeste" (1987) que fue galardonado con el Premio Adonais de 1986, según han informado los organizadores del premio. El jurado de esta edición ha estado integrado por los escritores Luis Alberto de Cuenca, Antonio Colinas, Juan Manuel Bonet, Tomás Rodríguez Reyes, Elena Almeda, Abel Feu y Javier Sánchez Menéndez.

No vemos ningún tipo de incompatibilidad significativa entre el jurado y el premiado.

Valoración subjetiva de la ecuanimidad del premio entendida como la posibilidad de que gane un desconocido: 60/100

El escritor zaragozano afincado en Soria César Ibáñez París ha ganado el Premio de Poesía Blas de Otero que otorga anualmente el Ayuntamiento de Bilbao en memoria del poeta que le da nombre. Ibáñez ha ganado el primer premio por su obra "La ruta de la sed". Junto a Sabina De la Cruz, Presidenta de la Fundación Blas de Otero y viuda del poeta a cuya memoria está dedicado este premio literario, los escritores José Fernández de la Sota y Luis Alberto Cuenca y el crítico literario Juan José Lanz ejercieron como miembros del jurado en la modalidad de castellano.

De nuevo, no vemos incompatibilidades significativas entre el jurado y el premiado.

Valoración subjetiva de la ecuanimidad del premio entendida como la posibilidad de que gane un desconocido: 60/100

domingo, 11 de marzo de 2012

Premios Ausiàs March a los mejores poemarios de 2011



Amigas y amigos:

Perdonad este largo silencio pero la lectura de todos estos libros no ha sido tarea sencilla, como no lo ha sido la valoración de los mismos. 2011 es probablemente el mejor año de poesía desde que comenzamos con el blog y el nivel de los libros ha sido muy alto. Las discusiones entre nosotros se podrían calificar, de manera eufemística, de ligeramente acaloradas.

Como suele ocurrir desde hace unos años, en primer lugar cada uno de los cinco miembros del jurado leyó todos los libros y votó por aquellos que creía mejores. En una primera reunión general cada persona defendió sus libros votados. En una segunda ronda cada uno de nosotros volvió a leer cada uno de los libros votados, aunque fuera con un único voto, y se produjo una segunda y eterna reunión. En ella de nuevo cada persona justificó y defendió sus posturas y se dialogó sobre todos los libros con al menos un voto. El resultado de tantas horas de trabajo es la lista que ofrecemos más abajo. Si alguien pensaba que la poesía española estaba en crisis se equivoca. Está en su mejor momento desde hace décadas y cada libro que aparece en esta lista, y en el listado final con los votos de cada uno de los cinco miembros del jurado, a pesar de los comentarios y correcciones sugeridas, es extraordinario.


Finalistas del premio Ausiàs March


Marta Agudo, 28010, Calambur

Diario poético y metapoético, reflexión de la identidad y de la existencia, quienes votaron a "28010" destacan la originalidad de su propuesta así como la profundidad de su aparente sencillez. A través de poemas breves en prosa, Marta hace un recorrido tortuoso por una vida vivida en presente con una enorme lucidez y capacidad de observación. La mirada es dura, firme y nada condescendiente, especialmente con ella misma. Hay un claro poso existencial tratado con un lirismo moderno y descarado. Quienes no dieron su voto a "28010" lo hicieron porque, a su entender, la relación metafórica entre filología y vida falla en ocasiones. Además, en su opinión, el verso suena a veces algo artificial y pomposo, se produce reiteración retórica y, a pesar de la brevedad del libro, existe la sensación de que los poemas se repiten en algunos casos.


Juan Bello, El futuro es un bosque que ya ardió en alguna parte, La Bella Varsovia


Interesante propuesta poética la de Juan Bello en su poemario “El futuro es un bosque que ya ardió”. Los miembros del jurado que dieron su voto a Juan Bello valoran su verso afilado, percutido sobre el papel como si el poeta se defendiera del blanco de la hoja con algo parecido a un subfusil en un mundo de nocturnidad melancólica e imágenes sugerentes de gran hondura. Las personas que no le votaron hablan de irregularidad en la calidad de los poemas, una cierta de ausencia de sentido autocrítico propio de un aparente exceso de confianza en su trabajo y la presencia de muchas voces soterradas que dificultan la concreción de una voz propia.


Eva Chinchilla, Los años abisinios, Amargord

Algo de metapoesía también encontramos en “Los años abisinios”, de Eva Chinchilla. Su manejo de la sintaxis es notable y logra transmitir su mensaje de una manera lírica y moderna a la vez, a pesar del cuestionamiento del lenguaje que su libro ofrece. La cantidad de puertas que cada poema abre sin cerrar las anteriores funciona especialmente bien en este poemario. También lo hace un léxico alejado de los convencionalismos de género. Quienes finalmente no otorgaron su voto a Eva explican que la repetición de ciertas imágenes y sustantivos termina fatigando la lectura por mucha que sea intencionada. La intencionalidad no otorga valor per se. En ocasiones el verso final de los poemas suele buscar más el impacto que la integración con el resto del poema. Habría, según ellos, un exceso de citas y sobraría el apéndice.


José Luis Gómez Toré, Claroscuro del bosque, Amargord

Gómez Toré experimenta una evolución estilística muy interesante desde su último libro publicado, "Fragmentos de un cantar de gesta", fuertemente criticado en este mismo blog . El libro, un hermoso diálogo entre la poesía de Toré y los dibujos de Marta Azparren, está inspirado en el encuentro que Heidegger y Paul Celan mantuvieron en una cabaña ubicada en la Selva Negra alemana. Respecto al libro de Toré, destaca especialmente el manejo de los silencios, de los espacios en blanco, la sencillez de un lenguaje que no necesita palabras grandilocuentes para expresarse y la profundidad de sus reflexiones. Quienes decidieron no votar por este libro mencionan la voluntad excesivamente aforística de sus versos y el hecho que se trata de un poemario excesivamente escueto y esbozado como para desarrollar la profundidad de su propuesta. En cualquier caso, hemos encontrado a un Toré mucho más interesante del que leímos hace unos años.


Ana Hidalgo, Hallar una hendidura, Point de lunettes

Ana Hidalgo ha escrito uno de los libros sorpresa del año. A través de poemas en prosa escritos con delicadeza pero a la vez con profundidad y firmeza Ana nos lleva a una geografía interior muy sugerente y atractiva. Su tono es reflexivo, invocativo, dialogante, extremo a veces. Las personas que no votaron al libro coinciden en parte de sus aciertos pero hablan de la similitud de su estilo con otras poetas mayores, como si todavía en el caso de Ana se estuviera en un proceso de nacimiento de una voz propia. En una línea similar comentan cierta falta de variedad retórica en la que sobraría la repetición de algunas figuras estilísticas. También que el lenguaje, en algunos poemas, súbitamente, resuena excesivamente poético y pierde frescura. Dicho lo cual, se trata de una poeta a seguir de cerca y con claras posibilidades de evolución dado su talento.


Robert Juan-Cantavella, Los sonetos, El gaviero

En su primer libro de poesía después de varias novelas, Juan-Cantavella hace una propuesta valiente en su intento de destrucción y recomposición de la tradición literaria, con juegos sintácticos interesantes y propuestas formales dignas de elogio. Algunos de los versos y poemas tienen una factura impecable así como un peso específico importante. Quienes no votaron finalmente por el libro de Juan-Cantavella pensaron que la forma, en una suerte de extraño barroquismo postmoderno, precede al fondo, y se hace difícil la comunicación lector-poeta en una voluntad ashberiana quizás mal entendida. Existe la sensación de ser textos que requieren de un mayor trabajo para dar unidad al libro y que, individualmente, también merecen un esfuerzo superior para que adquieran cuerpo y no se queden en una suerte de esbozo postmoderno.


Juan Antonio Marín, Yo he vivido en la tierra, Polibea.

Juan Antonio Marín quizá sea, de momento, el último premio Adonáis que sigue haciendo honor a la historia del premio. Poeta de la soledad y de la humanidad, en "Yo he vivido en la tierra" nos trae un retrato brutal y terrible de nuestra condición existencial. A la necesidad de comunicarse con el mundo que el sujeto poético siente se enfrenta una alienación clarísima, una incomunicación que se muestra en lugares cotidianos, como el metro especialmente. Poesía doliente y sufrida, Marín logra con creces el objetivo principal de su libro: hacernos sufrir con él. Acompañarlo. Por el lado menos positivo, y en palabras de quienes no votaron el libro, el poeta se mueve bien alejado de la retórica pero su manejo de la metáfora, a veces abundante, es artificioso y poco brillante, una especie de herencia de la época Adonáis que haría bien en quitarse. También comentan que el exceso de dolor y de autocompasión puede caer con facilidad en el victimismo. Independientemente de esto último, algunos poemas y versos son dignos de una antología.


José María Millares Sall, Krak, Calambur

En este libro Millares no está a la elevada altura que dejó en "Cuadernos" pero no siempre un artista es capaz de repetir la calidad de su obra, especialmente si las condiciones no son las más favorables. Millares construye un largo poema de una dureza existencial considerable a través de múltiples imágenes de clara raíz surrealista e irracionalista, poema que a su vez es un grito contra la muerte y el papel de la poesía en una lucha que se da por perdida. Escrito sin puntuación, en un verso libérrimo, destacan por curiosas las críticas soterradas a todos los venecianos y su ironía. Que un poeta escriba con este descaro y rebeldía a su edad debería ser motivo de esperanza.


Luis Muñiz, Libro Segundo, Trea

Muñiz continua en franca progresión desde su "Un fragor Indeterminado". Quienes decidieron apostar por Muñiz hablan de su excelente manejo de los tiempos verbales, de la ausencia natural de retórica, de un tono prosaico que esconde un lirismo significativo, de la pluralidad de estilos y temas y, finalmente, de un mensaje reflexivo y filosófico interesante y atractivo. Quienes no han votado por el libro hablan de un excesivo prosaísmo, que a veces convierte un ensayo en un poema a base sólo de encadenar versos. Ese prosaísmo transforma, en su opinión, muchos poemas en reflexiones sobre temas muy diversos sin que el interés del lector se descentre del contenido de la reflexión, olvidando la parte poética del texto. En conclusión, un libro que trata de la actualidad sin que tenga apariencia de perderla, bien construido, bien escrito y en donde la diferencia mayor entre los miembros del colectivo ha sido el nivel prosaico del poemario. Que los lectores decidan. En cualquier caso, incluso visto desde un punto de vista prosaico, el "Libro Segundo" es uno de los mejores libros del año y por eso está en esta lista.



Accésit Premio Ausiàs March (4 votos)


Diego Doncel, Porno ficción, DVD

Diego Doncel ha publicado otro de los mejores libros del año. Es curioso que los que consideramos los tres mejores libros sean libros completos, poemarios en donde cada poema forma parte de un substrato narrativo que recorre el libro de principio a fin (aunque el de Mas Alcaraz rompa la línea temporal). En la "Porno Ficción" de Diego Doncel encontramos una historia con un trasfondo de ciencia ficción, un suerte de escenario post-apocalíptico, sobre el que el poeta construye unos textos excelentes en su ironía, en su canto particular al amor perdido en el pasado, en su crítica feroz a la identidad y a una sociedad mercantilizada en la que el sexo es un producto. Sobre poemas en prosa Doncel extiende en largos versículos su letanía y alcanza momentos de gran brillantez tanto poética como reflexiva. La persona que no ha dado el voto final al poeta estima que el uso de las comparaciones es abundante desde el punto de vista retórico, y éstas son poco originales y muy seguidas. A la vez señala un cierto victimismo del sujeto poético que termina resultando tedioso. Independientemente de detalles más técnicos, se alaba el conjunto del libro por su originalidad, por su estética innovadora y por sus momentos de lirismo elevado. Un libro que nos lleva a reflexionar hacia donde está dirigiéndose la sociedad actual.


Juan Andrés García Román, La adoración, DVD

Independientemente de la bronca que tuvimos con García Román hace tiempo, nuestra labor es valorar poesía, no personalidades. Y García Román ha escrito su mejor libro hasta la fecha, por mucho que algunos se agarren a su fosforo astillado como una tabla de salvación. Para empezar, García Román ha logrado quitarse por fin toda la poética con la comenzó su carrera (como aquella "Perdida latitud" que ahora parece escrita por una persona diferente). De hecho, renuncia claramente en su bibliografía a toda la producción anterior al Fósforo. En "La Adoración" encontramos de nuevo un libro lleno de imágenes portentosas, dignas de uno de los poetas con mayor imaginación de la poesía contemporánea y con muchos menos fallos en la construcción metafórica que en "El fósforo astillado". Hallamos además ese sentido del humor tan propio y especial que logra que el lector pueda pasar de la emoción a la carcajada sin mayores problemas. Y existe ese mundo onírico que nos retrae a la infancia y que tiene un enorme poder de seducción para el lector al mismo tiempo que nos lleva al substrato de pérdida existencial que subyace en todo el poemario. El miembro del jurado que no le dio el voto definitivo habla de un poeta con mucho talento al que le falta ir un paso más allá. Tal y como está escrito el libro, más una novela que un poemario, podría pasar, según esta persona, cambiándole la portada y la fecha de publicación, por un libro publicado por un miembro de la escuela surrealista en los años 20. También, de acuerdo con esta persona, hay una verborragia de imágenes que a veces están ahí simplemente por pura estética, se desbordan y entorpecen el desarrollo natural y el ritmo orgánico de la lectura. En opinión de este miembro del jurado, al libro le falta a veces profundidad, alma, y no precisamente por su voluntad "antimetafísica". Y le sobraría 20 páginas. En cualquier caso, la opinión general es que la singular y original historia de Expósito y sus compañeros de viaje está en nuestra poesía para quedarse .


Premio Ausiàs March al mejor libro del año (5 votos)


Julio Mas Alcaraz, El niño que bebió agua de brújula, Calambur

Unanimidad a la hora de valorar el poemario de Mas Alcaraz, un libro con un substrato narrativo que lo sitúa, en ocasiones, en el terreno de la poesía novela o de la poesía teatro. Varios son los aspectos a destacar. En primer lugar, de nuevo estamos ante un poeta con una imaginación portentosa, otro de los poetas con mayor imaginación de la poesía contemporánea, un autor capaz de crear imágenes en sitios insospechados, de hacernos ver lo que su mente puede ver, por muy extraño que resulte. Nunca, además, las imágenes son gratuitas. Todas tienen su motivo y su razón. En segundo lugar está su manejo del lenguaje. El poeta hace lo que quiere con él, lo adapta a cada situación dramática. Puede ser ortodoxo en su manejo de la sintaxis y romperla a su antojo, y siempre con un propósito y por una causa lógica. En tercer lugar habría que hablar de la hondura del poemario y de sus reflexiones. Cuando el poeta quiere mostrarnos el hundimiento del sujeto poético, nos arrastra hasta el mismo infierno y cuando quiere enseñarnos sus momentos de éxtasis nos transporta con él hasta la cima. De la misma manera que maneja el lenguaje, maneja al lector. Su capacidad de transmisión lírica es muy alta, incluso en los poemas más difíciles. Por el lado negativo, además de una extenuante lista de agradecimientos y una bendición apostólica al comienzo del libro que no hacía falta, quizá al poemario le sobran algunos pocos poemas que no están a la altura de la brillantez de la mayoría. Aunque se percibe el elevado nivel de autoexigencia, algo insólito en nuestras letras, el autor todavía puede dar más de sí teniendo en cuenta su talento, en especial en la exploración de ritmos poéticos nuevos para la poesía en español, algo que ya ensaya en este poemario y en algunas de sus traducciones. Seis años han pasado desde su primer libro, "Cría del ser humano", y varios libros traducidos. El saltoen calidad ha sido enorme. "El niño que bebió agua de brújula" es un puñetazo sobre la mesa de la lírica escrita en castellano, la poesía que imaginamos que se podía escribir en el siglo XXI y que apenas habíamos visto todavía. Con este libro el poeta se sitúa en un lugar destacado de la poesía con un libro que no tiene fecha de caducidad. El mayor reto para Mas Alcaraz será como continuar desde este libro, y si será capaz, reto difícil, de mantener la brillantez y el genio logrados.



Miembro 1º


Marta Agudo 28010
Deborah Anton Menos Amélie, más Clarissa Dalloway
Aureliano Cañadas Cuerpo celeste
Diego Doncel Porno Ficción
Berta García Faet Fresa y herida
Juan Andrés García Román La adoración
Robert Juan-Cantanela Los sonetos
Julio Mas Alcaraz El niño que bebió agua de brújula
Juan Antonio Marín Yo he vivivo en la Tierra
José María Millares Sall Krak
Esther Ramón Sales
Rafael Saravia Llorar lo alegre


Miembro 2º


Pilar Adón La hija del cazador
Juan Bello El futuro es un bosque que ya ardió…
Ramiro Gairin Pintar de azul los días laborables
Juan Andrés García Román La adoración
Juan Gelman El emperrado corazón amora
Robert Juan-Cantanela Los sonetos
Jesús Javier Lázaro Puebla El verano de los flamencos
Erika Martínez Cabrera Lenguaraz
Julio Mas Alcaraz El niño que bebió agua de brújula
Luis Muñiz Libro segundo
Federico Ocaña Desprendimientos
Lola Torres Bañuls Norte (Cercanías)


Miembro 3º


Juan Ramón Barat La brújula ciega
Marcos Canteli Es brizna
Diego Doncel Porno Ficción
José Luis Gómez Toré Claroscuro del bosque
Ana Hildalgo Hallar una hendidura
Luis María Marina Continuo mudar
Julio Mas Alcaraz El niño que bebió agua de brújula
Juan Antonio Marín Yo he vivivo en la Tierra
José María Millares Sall Krak
Luis Muñiz Libro segundo
Benito del Pliego & Pedro Nuñez Fábula
Teresa Soto Erosión en paisaje


Miembro 4º


Luis Bagué Quilez Página en construcción
David G. Borrero ¡(…)!
Eva Chinchilla Años abisinios
Diego Doncel Porno Ficción
Carlos Fernández López Vitral de voz
Juan Andrés García Román La adoración
José Luis Gómez Toré Claroscuro del bosque
Pilar González España Retráctiles
Juan González Soto Donde la semilla fue árbol
Clara Janés Peregrinaje
Julio Mas Alcaraz El niño que bebió agua de brújula
José Antonio Rodríguez Alva Peligroso asomarse al interior
Martín Rodríguez Gaona Códex de los poderes y los encantos


Miembro 5º


Marta Agudo 28010
Juan Bello El futuro es un bosque que ya ardió…
Eva Chinchilla Años abisinios
Diego Doncel Porno Ficción
Julio Espinosa Guerra Sintaxis asfalto
Juan Andrés García Román La adoración
José María Gómez Valero Los augurios
Félix Grande Libro de familia
Ana Hildalgo Hallar una hendidura
Julio Mas Alcaraz El niño que bebió agua de brújula
José Ramón Otero Roko La falta de lectura
Nicanor Vélez La vida que respira

domingo, 22 de enero de 2012

Listado definitivo de poemarios publicados en España en 2011

Este es el listado definitivo de libros de poesía publicados en 2011 que hemos recibido en el plazo establecido y que usaremos para el premio Ausiás March a mejor/mejores libros del año. De todos estos libros seleccionaremos los que creemos son los mejores bajo nuestro muy subjetivo criterio.

Como siempre, agradecemos a todos los editores y autores que han hecho posible este enorme esfuerzo. Gracias a todos.


Autor Título



1 Héctor Acebo Camas de hierba
2 Pilar Adón La hija del cazador
3 Humberto Ak´abal P Donde los árboles
4 Claribel Alegría Otredad
5 Escandar Algeet Abarquero Alas de mar y prosa
6 Juan Bautista Alonso Moreno Mucha policía
7 Ajo Micropoemas 3
8 Marcos Ana Poemas de la prisión y la vida
9 Marta Agudo 28010
10 Claribel Alegría Claridad
11 María Dolores Alonso Fernández Cántico en elipse
12 Patxi Andión Con toda la palabra por delante
13 Esperanza Aparicio En un mar de dudas
14 María Arrabal Cano Cruzar el umbral
15 Martha Asunción Alonso Detener la primavera
16 José María Álvarez Los oscuros leopardos de la luna
17 Rocío Álvarez Albizuri El pájaro diamante
18 Rebeca Álvarez Casal Suponiendo la cicatriz…
19 Mario Álvarez Porro Negociando el dolor
20 Cristina Álvarez Puerto Cuatro estaciones para un vuelo
21 Ana Isabel Alvea Interiores
22 Deborah Anton Menos Amélie, más Clarissa Dalloway
23 Eva Arévalo Márquez Cuando la lluvia no te alcanza
24 Javier Arnaldo Nosotros
25 Jesús Arroyo Contracaminante
26 Javier Asiaín El triunfo de Galatea
27 María Victoria Atencia El umbral
28 Luis Artigue La noche del eclipse eres tú
29 Javi Baena Leña de mi árbol genealógico
30 Luis Bagué Quilez Página en construcción
31 Juan Ramón Barat La brújula ciega
32 Jorge Barco Vivimos encerrados en burbujas transparentes
33 Diana Bellessi Variaciones de la luz
34 Juan Bello El futuro es un bosque que ya ardió…
35 Manuel del Barrio Donaire Alguien que sea yo
36 David Benedicte Maremágnum 44
37 Susana Benet Huellas del escarabajo
38 Rafael Benegas Inciertas conclusiones
39 Domingo Ángel Bernal El entramado de la nostalgia
40 Juan Antonio Bernier Árboles con tronco pintado de blanco
41 Gsús Bonilla Menú del día…A día
42 Piedad Bonnett Explicaciones no pedidas
43 Isabel Bono Pan comido
44 Carmen Borja Mañana
45 David G. Borrero ¡(…)!
46 Siracusa Bravo De cómo Peter Pan me quitó demasiado
47 Carlos Bruselario La vía del loto
48 Raquel Bullon Acebes Cuando aprendí braille para leer tus cicatrices
49 Francisco Javier Burguillo Musa de fuego
50 Jesús Alonso Burgos Estrategias de la usura
51 Rafael Calero El placer de ver morir un ángel
52 José Manuel Camacho Invitación al lago
53 Rocío Cantarero O bocetos para una sola novela
54 Marcos Canteli Es brizna
55 Aureliano Cañadas Cuerpo celeste
56 Ernesto Cardenal Tata Vasco
57 Pablo Casares Gurmendi Quiénes fuimos
58 Waltel Cassara Nostalgia y otros poemas
59 Ana María Castillo Moreno La música de las horas
60 Mari Ángeles Cabré Gran amor
61 Tirsa Caja Los más queridos nombres
62 Ben Clark La mezcla confusa
63 Pureza Canelo Cuatro poéticas
64 Harkaitz Cano Compro oro
65 Iván Carabaño Océano jazz
66 Pablo Casares Quiénes fuimos
67 Santiago Castelo La hermana muerta
68 Silvia Castro Méndez Señales en tiempo discreto
69 Alejandro Chico Morales Dimensión de la frontera
70 Eva Chinchilla Años abisinios
71 Jeannette L. Clariond Leve sangre
72 María Teresa Cervantes Cartas a un apátrida
73 Carlos Contreras Elvira El eco anticipado
74 Rafael de Cózar Los huecos de la memoria
75 Pedro Alberto Cruz Sánchez No comparto las razones de la luz
76 Adolfo Cueto Dragados y construcciones
77 Antonio Crespo Massieu Elegía en Portbou
78 Javier Cristóbal Genealogía de lo imposible
79 Alberto Cubero y Leandro Alonso La textura metálica del dolor
80 José María Cumbreño Genealogías
81 Emilia Currás A la sombra del árbol perdido
82 Zacarías Custodio Lorenzo El candil de la memoria
83 Ricardo Defargues Este don a la muerte
84 Samir Delgado Tratado del carnaval en Niza
85 Amelia Díaz Benlliure Manual para entender las distancias
86 Marcelo Díaz García Mapa de costas
87 Ivan Díaz Sancho Al ruiseñor aquí nos lo comemos
88 Ana S. Díez de Collantes La espuela y el halda
89 María Domínguez Cuantos de hadas para mayores…
90 Diego Doncel Porno Ficción
91 Iñaki Echarte Soy tan blanco que cuando palidezco desaparezco
92 José Elgarresta Escritos en la zona oscura
93 Juan Carlos Elijas Lisboa Blues
94 Juan Carlos Elijas Nuevo aullido para Allen Ginsberg
95 Ignacio Elguero Siempre
96 Lourdes Espínola Desnuda en la palabra
97 Julio Espinosa Guerra Sintaxis asfalto
98 Estíbaliz Espinosa Río Papel a punto de
99 Mariano Estrada Gotas de hielo
100 Carlos Fernández Alma Pagés/Laietana
101 Rafael Fernández Campos Mirando las pisadas
102 Ricardo Fernández Esteban Pensando en vosotras
103 José Luis Fernández Hernán Un jardín contra la muerte
104 Carlos Fernández López Vitral de voz
105 Ricardo Fernández Moyano Rituales de identidad
106 Patricia Fernández Pacheco Manual para acróbatas
107 José Antonio Fernández Sánchez La eterna pubertad de Lino
108 Álvaro Fierro Colonizado corazón/Libro de piropos
109 Pilar Fraile Amador La pecera subterránea
110 Pelayo Fueyo El cielo de las cosas
111 Ramiro Gairin Que caiga el favorito
112 Ramiro Gairin Pintar de azul los días laborables
113 Ilia Galán Ars sacra
114 Enrique Galindo Ángeles al doblar la esquina
115 Sara R. Gallardo Epidermia
116 Federico Gallego Ripoll Dentro del día, acaso
117 Luis Gámez El libro de las transformaciones
118 Pedro Gandía Acrópolis
119 Francisco Gata Amate Desterrados
120 Angélica Gatell Cenizas en los labios
121 Edgar Allan García El fantasma de Platón
122 Manuel García De bares y tumbas
123 Rosa María García Barja Entre la cal y el tiempo
124 Ana García Cejudo Hojas del cuaderno negro
125 Berta García Faet Introducción a todo
126 Berta García Faet Fresa y herida
127 Daniel García Florindo Cuadernos de Lisboa
128 Ernesto García López Ritual
129 Luis García Montero Un invierno propio
130 Alicia García Núñez Sombras cuarteadas de neón
131 Maria Jesús García Pascual Poesía para niñas bien
132 Aaron García Peña Enciclopedia poética de España: Barcelona
133 Emilio García Pérez Luces de soños
134 Juan Andrés García Román La adoración
135 Michel Gaztambide Moscas en los incunables
136 Juan Gelman El emperrado corazón amora
137 Jorge Gimeno La tierra nos agobia
138 Pere Gimferrer Rapsodia
139 Agustín Gómez Arcos Poesía
140 María del Rosario Gómez González Su luz me basta
141 Cristian Gómez Olivares La casa de Trotsky
142 José Luis Gómez Toré Claroscuro del bosque
143 José María Gómez Valero Los augurios
144 Alberto Gómez Vaquero Manual sobre cosas irreparables
145 Pilar González España Retráctiles
146 Coriolano González Montañez Cuadernos y notas de viaje
147 Juan González Soto Donde la semilla fue árbol
148 Manuel Guerrero Cabrera Loco afán
149 Daniel Guillén Sanguino Rosas en diciembre
150 Luis Gutiérrez del Arroyo Lagos
151 José Gutiérrez Román Los pies del horizonte
152 Antonio Gracia El mausoleo y los pájaros
153 Félix Grande Libro de familia
154 Silvia Guerra Pulso
155 Vanessa Gutiérrez La quema
156 Almudena Guzmán Zonas comunes
157 José Heredia Maya Penar ocono
158 Rocío Hernández Viento de cuchillos
159 Maribel Hernández del Rincón Extraños con paraguas
160 Beatriz Hernanz Los volcanes sin sueño
161 José María Herranz Contreras Donde no habite el olvido
162 Paola Herrera Lesdesma Libre de pecado
163 Mauricio Herrero Jiménez La presencia inasible de la luz
164 Fermín Higuera Religare
165 Ana Hildalgo Hallar una hendidura
166 María Huidobro El hechizo de las perlas
167 José Infantes El dardo en la llaga
168 Clara Janés Peregrinaje
169 Darío Jaramillo Sólo el azar
170 Víctor Jiménez Al pie de la letra
171 Antonio Jiménez Millán Clandestinidad
172 Robert Juan-Cantanela Los sonetos
173 Rafael Juárez Medio siglo
174 Karmelo C. Iribarren Otra ciudad, otra vida
175 José Kozer Tokonoma
176 Manuel Laespada Vizcaíno El envés del espejo
177 Magdalena Lasala Arderé en el exilio de tu cuerpo
178 David Leo García Dime qué
179 Alejandro López Andrada Las voces derrotadas
180 Manuel Lacarta Otoño en el jardín de Pancho Villa
181 Francisco Lambea Bornay Densidad del labio
182 Jesús Javier Lázaro Puebla El verano de los flamencos
183 Alberto Lauro Hijo de mortales
184 Santiago Liberal Híbridos
185 Antonio Linares El perfil de la torre
186 Ouka Leele Pan de verbo
187 José Carlos Llop Cuando acabe septiembre
188 Jonás López Nihilismo kitsch
189 Enrique López Clavel Entre cuatro labios de hombre
190 Santiago López Navia Ensueño y mediodía
191 Fernando Lorente Amanecer mañana
192 José Ángel Losada Gahete Poemas de los cuadriales
193 Martín Lucía Poemario en construcción
194 Juan Manuel Macías Tránsito
195 Joan Margarit No estaba lejos, no era difícil
196 Luis María Marina Continuo mudar
197 Antonio Marín Albalate Enclave de barro
198 Ángela Martín del Burgo Poemas de viaje
199 Vicente Martín Martín El corazón a tientas
200 Ana Martín Puigpelat Lyon 1943
201 Alicia Martínez Corazones de manzana
202 Erika Martínez Cabrera Lenguaraz
203 Juana Martínez López-Prisuelos La catedral del recuerdo
204 Hilario Martínez Nebreda El almanaque de piedra
205 Antonio Martínez Sarrión Farol de Saturno
206 José Mas Han cegado a Narciso
207 Julio Mas Alcaraz El niño que bebió agua de brújula
208 Juan Antonio Marín Yo he vivivo en la Tierra
209 Salustiano Masó Contemplación y aventura
210 Ángel Méndez Bernal Acabo en el latido
211 Juan Meseguer Un secreto temblor
212 Nuria Mezquita de Haro Sienes de amor
213 José María Millares Sall Krak
214 César Antonio Molina Cielo azar
215 Toni Montesinos La ciudad gris
216 Miguel Montesinos Paneda El orden de las cosas
217 Carmen Moral A orillas de mí
218 David Morello Retorno a la voz
219 Cristina Morano Tamaño El ritual de lo habitual
220 Inmaculada Moreno Donde la hoguera verde
221 Verónica Moreno Un cuarto oscuro
222 Ricardo Moreno Mira Carrefour es el anticristo
223 María R. Moreno Molina Antropología del asco
224 Pablo Moreno Prieto Lauda
225 Hugo Mújica Y si después del viento
226 Luis Muñiz Libro segundo
227 Ángel Muñoz Amor manual
228 Blas Muñoz Viva ausencia
229 Blas Muñoz La herida de los días
230 Tito Muñoz Sobras escogidas
231 Olga Muñoz Carrasco La caja de música
232 Kepa Murúa El gato negro del amor
233 José Luis Nieto Aranda Rastros perdidos
234 Raúl Nieto de la Torre Salir ileso
235 Pepa Nieto Gómez Tiempo inhabitable
236 Antonino Nieto Rodríguez Un fantasma perfecto
237 Fernando Nombela Soñé la muerte y otros poemas
238 Teresa Núñez El juglar de los pájaros
239 María Francisca Núñez Tomás Nómada del tiempo
240 Fran Nuño Deambulaciones
241 Federico Ocaña Desprendimientos
242 Pedro Olaya Continental Blues
243 Emilia Oliva García Quien habita el fondo
244 Jorge Olivera Kayac
245 Araceli Oliveros El paisaje y la calma
246 Iván Onia Valero Tumbada cicatriz
247 Antonio Orihuela Todo el mundo está en otro lugar
248 Miguel Ortega Lucas La edad del mediodía
249 José Ramón Otero La falta de lectura
250 Manuel Palencia Gómez Mundo, demonio, carne
251 Carlos Peinado Elliot La herrumbre herida
252 Adrián Nicolás Penela Vida súbita
253 David Pérez Vega Siempre nos quedará Casablanca
254 Joaquín Pérez Azaustre Las ollerías
255 Javier Pérez Walias Arrojar piedras
256 Ángel Petisme La noche 351
257 Princesa Inca La mujer precipicio
258 Inmaculada de Pando Rojo Los hilos esparcidos sobre la tierra
259 Carmen Plaza El rastro de la herida
260 Manuel Parra Pozuelo Suma y sigue
261 Juan Peña Dura seda
262 Esther Peñas Penumbra
263 Benito del Pliego & Pedro Nuñez Fábula
264 Antonio Portela Dogos
265 Alex Portero Irrendento
266 Juanma Prieto Noctívagos
267 Cecilia Quílez Vísteme de largo
268 Luis Miguel Rabanal Lugares
269 Adrián Ramírez Gento Retazos de compañía
270 Esther Ramón Sales
271 Pedro Ramos El país de los méritos
272 Carmen Ramos Pérez Mudanza interior
273 David Refoyo Odio
274 Antón Reixa Lecciones de casas
275 Ángela Reyes Fantasmas de mi infancia
276 Raquel Rico Linage Resplandor
277 Jorge Riechmann El común de los mortales
278 Nerea Riesco Desnuda y en lo oscuro
279 Mariano Rivera Cross Entre sombras
280 Antonio Rivero Lejos
281 Isel Rivero De paso
282 Julio Rodríguez Doméstica
283 Ángel Rodríguez Abad El centinela perpetuo
284 José Antonio Rodríguez Alva Peligroso asomarse al interior
285 Martín Rodríguez Gaona Códex de los poderes y los encantos
286 Mario Rodríguez García Prohibido arrojar escombros
287 Víctor Rodríguez Núñez Reversos
288 Mercedes Roffé Canto errante
289 Antonio Rómar Diversos destinos consulares
290 José de María Romero Barea Mil novecientos setenta (y dos)
291 José Carlos Rosales Poemas a Milena
292 Manuel Ruíz Torres El inicio del mundo
293 Eloy Sánchez-Rosillo Sueño del origen
294 Julio Santiago Poesía Depilada II
295 José Sánchez González Sentires y recuerdos
296 Fernando Sánchez Mayo Tácticas interiores
297 Andrés Sánchez Robayna Cuaderno de las islas
298 Pedro Sánchez Sanz Memoria del amor deshabitado
299 José Sánchez Tortosa Ajuste de cuentas
300 María Sánz Retablo de cenizas
301 Rafael Saravia Llorar lo alegre
302 Eduardo Scala Ajedrez: libro de naipes
303 Eduardo Scala Preludio
304 Tomás Segovia Estuario
305 José Ignacio Serra Del rigor en el juego
306 Francisco Sevilla Abracadabra
307 Isidro Sierra Las malas pasiones
308 Joaquín Silguero Estagnan A tientas
309 Vicente Simón El guapo
310 Rafael Soler Las cartas que debía
311 José Manuel Suárez El mal de amén: Tríptico
312 Teresa Soto Erosión en paisaje
313 Aida Táboas El libro de los silencios
314 Estelle Talavera Ciudad de elefantes
315 Juan José Téllez Las grandes superficies
316 Fernando Tornero Torner Primera Estación
317 Elena Torres Alrededor del deseo
318 Lola Torres Bañuls Norte (Cercanías)
319 Riot Über Alles Mussolina
320 Almudena Urbina Azar y vuelo
321 Miguel Velayos Permanencia en el tránsito
322 Diego Vasallo Canciones que no fueron
323 Raquel Vázquez Por el envés del tiempo
324 Juana Vázquez Marín Escombros de los días
325 Nicanor Vélez La vida que respira
326 Joan de la Vega La montaña efímera
327 Ivan Vergarad Montañas de Aurelia
328 José Vidal-Valicourt Blanchot, espacio del desastre
329 Rafael Vargas Los códices de Arcadia
330 Santiago Vivanco Antimateria
331 Laura Yasan Animal de presa
332 Felipe Zapico Balances parciales